martes, 21 de septiembre de 2010

Recordando también se puede olvidar

Repetición, madre de la enseñanza. Sí así no es, pues, disculpe la ignorancia. Repetición, madre de alguien tienes que ser. Eres nuestra madre para todos aquellos que nos perdemos en el olvido de las neuronas que no pueden trabajar a costo de los estilos de vida, a costo del olvido voluntario, a costo de algún amargo recuerdo que tilda el avance. Tanto libro, tanta habla...

- Hay que suprimir todo, definitivamente. Borrar escala por escala y así el aire dejará de rodearnos.

- Ajá...

A ver, repasemos y no quite los ojos de la pantalla. ¿Qué ves? No se vale recitar externos

- Yo veo una vida truncada, con errores, aciertos, con virtudes y defectos que se apilan por temporadas y días. Se apila más de lo acostumbrado en sociedad. Quisiera destacar el inoficio de la situación vivencial pero no es excusa. Está bien, la vida no cabe en una frase. Cabe en la vida.

Se para de la silla.

- ¿Desea continuar? Le esperan en casa, señorita.