Tengo una rara sensación en mis dedos
Como si tuvieran fuego
Y que ya no puedo abrazar las materias
Conseguir otra visión para mirar más allá de eso
Y dejar de sentirme tan sola en la tarde
Mis manos están libres
Llaman a los indiferentes
Cometen errores y no las puedo reprender
Trato de escribir y no me dan sentido
Las miro como si las fuera a arrancar
Pienso en mis héroes
Que tan erróneamente los nombré así
Y solo me queda uno que es muy grande
Mis manos se cruzan en mi cara
Y no me dejan verlo
Aprieto mi cara a ver si despierto mi felicidad
Si pronuncia una sonrisa
O quitarme la irritación de los ojos
Sacudir la migraña que produce el insomnio y la inseguridad
Todos tenemos vacíos y confusiones
Pero unos más que otros
Y no todos los días
Yo llevo una larga racha y no quiero continuar
Me pregunto como mis manos antes podían hablar del amor
Como debilitaban un corazón y lo conmovían
Como hacían sonar notas que me sanaban
Y ahora solo están pálidas y tibias
Sin misterio y sin gran uso
Las vuelvo a mirar y las pongo contra la luz
Para una radiografía y sacar el diagnóstico
Son niñas violentas
Son tiernas, traicioneras, experimentadas
Solitarias y a veces me preguntan por los que me olvidaron
Son más activas que mi cerebro
Siguen libres y siguen sin rumbo
Hablan más por mí que mis labios
Son 2 y piden compañía
Se divierten entre mi enredado cabello
Tratan de actuar más que yo cuando consigo hablar
Son las primeras en gritar cuando pasa algo que me hace feliz
Son las primeras en enfriarse cuando se abre la herida
Cuando las atan, dejo de ser
Justo como hoy
Mañana alguien me librará
Prefiero que sea algo
Que lo pueda sostener con mis manos
Y no dejarlo ir esta vez
Estaba mirando la vieja biblioteca de Word y me encontré con la Marie de 15 años. Esa niña a veces no la termino de entender.
